Otoño es una temporada espectacular, tanto por el clima, los colores, los olores y todas las nuevas cosas que se pueden hacer. En Budapest es una de mis temporadas favoritas, tienes días soleados y noches cálidas, empiezan muchos festivales y llega la época de usar suéteres bonitos, cómodos y calientitos, pero sin morirnos de frío.

La ciudad se vuelve de un color naranja espectacular, empezando por los atardeceres que puedes disfrutar, las hojas de los árboles y los colores que aún lucen en la ropa de la gente que pasea por la ciudad.

Como en todo sitio, cada uno tiene sus particularidades, y claro está, Budapest no se queda atrás, así que te daré una lista de 10 cosas que hacer y disfrutar durante esta temporada para que te lleves lo mejor de tu visita otoñal a esta hermosa ciudad.

10 cosas que hacer en otoño

Tomar vino caliente

Una de las cosas que llega con el frío y el otoño es el vino caliente, en húngaro conocido como Forralt Bor, que significa “vino hervido”. Esta tradición viene de Roma en el siglo 2, donde por primera vez se vio el vino calentado y con especias. Como los romanos recorrieron y conquistaron gran parte de Europa, la tradición fue viajando con ellos y quedando en distintos países.

Para los que son muy amantes, o si en tu ciudad no lo tienen, te doy un secreto: en los supermercados venden la bolsita para hacerlo en casa y si le agregas lonjas de naranja y un palito de canela, queda super bueno para ser un vino caliente casero fácil y económico. Y si le quieres dar un poquito más de sabor, algunos también le agregan un toque de amaretto.

Comer kürtőskalács

Los kürtőskalács, o bien conocidos como “Chimney cake” en inglés, son unos postres típicos húngaros que se hacían en un principio para ocasiones especiales como fiestas, bodas, cumpleaños, cuando venía una visita especial o en determinados eventos. Claro está, con el tiempo se fueron volviendo tan populares que pasaron a ser parte de la vida cotidiana y como todo, fueron evolucionando tanto que hoy en día hay festivales destinados a esta delicia húngara.

Los kürtőskalács son un cilindro que se hace enrollando una tira de masa alrededor de la base cilíndrica y poniéndolo sobre un fuego abierto. Luego de que esté cocido, pasa sobre distintos toppings de modo que quede cubierto en ellos, que pueden ser canela, cacao, coco, chispas de chocolate, entre otros. En los festivales o locales más especializados los puedes encontrar también rellenos ya sea de helado, o con crema y frutas, etc.

Ir al Oktober Fest

El Oktober, como su nombre lo dice, es una tradición del mes de Octubre que se originó en Munich en 1810 cuando el Príncipe Ludwig se casó con la Princesa Sassonia-Hildburghausen e invitaron a todos los ciudadanos de Munich a festejar en los campos que se encuentran frente a la puerta de la ciudad, con carreras de caballos como cierre de la celebración, lo que llevó a que se quisiera repetir el año siguiente, dando inicio así al Oktober Fest. Hoy en día es un festival que se hace a nivel mundial donde se prueban distintos tipos de cervezas tanto comerciales como artesanales y en algunos hacen presentaciones de baile y música típica. Aquí en Budapest usualmente se celebra a inicios del mes de octubre y las entradas se pueden comprar online con anticipación. Si deseas mantenerte informado para el año próximo, puedes seguirlos en Facebook en la página oktoberfestbudapest o en su página web https://oktoberfestbudapest.hu (está en húngaro) para que no te lo pierdas.

Asistir a un festival de vino

Otro festival super famoso en Budapest durante el otoño es el Festival del Vino, y es que en realidad tenemos varios en distintas zonas de la ciudad. El más famoso de todos es el que se realiza en el castillo de Buda entre septiembre y octubre donde puedes probar todo tipo de vino incluido uno que es azul. Durante este festival también se pueden apreciar distintos conciertos y presentaciones de bailes tradicionales húngaros. Imagina estar en los jardines del castillo, con la vista espectacular de la ciudad y disfrutando de un buen concierto con una copa de vino en mano, suena excelente, ¿no? El festival usualmente dura de 3 a 4 días, comenzando un jueves o viernes hasta el domingo. Las entradas las venden con anticipación y puedes comprar distintos tipos.

Si no te quieres perder de la información para el año que viene, asegúrate de guardar en tus favoritos su página web, donde podrás revisar también los anteriores. La página está en inglés http://budacastlebudapest.com/budapest-wine-festival/.

Algunas de las recomendaciones más comunes para el festival es que te vayas con zapatos cómodos para caminar, preferiblemente planos ya que es en los jardines y caminos de piedras; llevar efectivo en moneda local ya que a veces el cambio en el festival puede ser más alto que en el centro; lleva agua contigo para que no te deshidrates; y por último, puedes tomar el bus 16 en Deak Ferenc Ter o en Adam Square que te llevará muy cerca del festival.

Pasear la ciudad en Lime o bicicleta

Con el clima perfecto de otoño, que no suele ser ni muy caliente ni demasiado frío, es el momento perfecto para pasear la ciudad ya sea haciendo un poco de ejercicio en bicicleta o en los famosos scooters. Ambos puedes alquilarlos en casi cualquier parte de la ciudad y es realmente una experiencia completamente distinta y una forma innovadora de ver la ciudad ya que puedes recorrer calles pequeñas u otros sitios que quizás antes no pasearías por flojera a caminar.

Para la bicicleta hay dos compañías bastante famosas en la ciudad Mol y Donkey, personalmente yo prefiero las de Donkey, son las naranjas, ya que son más livianas de cargar y te cansarán menos, además, no es necesario dar un depósito de gran cantidad para alquilarlas, simplemente te descargas la aplicación y ahí mismo pagas el depósito de como 8 euros aproximadamente, y dependiendo de cuánto la uses, puede que pagues un poquito más o incluso te devuelvan dinero.

Los scooter son con la compañía Lime, e al igual que con las bicis, debes descargarte la aplicación y luego sencillamente buscas el más cercano, lo escaneas y asocias tu tarjeta para el pago y que empiece la diversión.

Dar un paseo en barco en el Danubio

Durante otoño el barco que te lleva a pasear el danubio aún funciona y es un momento perfecto para usarlo porque podrás disfrutar de los bellos atardeceres que te ofrece esta temporada en la ciudad. El clima por otro lado no está tan caliente que te quemas, ni tan frío que te congelas, con un buen suéter o una chaqueta lo podrás disfrutar muchísimo, y si te estás tomando un vino o un café pues mucho más. De lunes a viernes, si tienes el ticket de 3 días o semanal o mensual del BKK puedes usar este medio gratuitamente.

Subir a la colina Géllert

La colina Géllert es algo que se debe hacer definitivamente una vez por temporada. Cada una de las estaciones te ofrece la colina de mil y un maneras distintas y las vistas de la ciudad también cambian bastante.

En invierno es algo de otro mundo, parece un mundo mágico sacado de un cuento de hadas, con todos los árboles cubiertos en hielo o nieve, las flores y hojas que aún quedan están bañadas de blanco y la colina parece un mantel blanco que te lleva el danubio y a la ciudad. Durante primavera empiezas a ver todas las flores nacer, los animales empiezan a escucharse nuevamente y la colina y la ciudad empiezan a cobrar vida poco a poco. Durante verano es perfecta para una buena caminata de ejercicio ya que sudarás todas las calorías de las cervezas de la noche anterior o te preparas para poder ir al bar esa misma noche. Y por último, durante el otoño, la colina se pinta de naranja y amarillo y respiras un aire fresco como un ninguna otra temporada, perfecto para subir y sentarte a descansar y disfrutar de la ciudad.

Pasear los parques de la ciudad

Así como la colina Géllert, hay otros parques que valen totalmente la pena pasearlos durante el otoño. Entre los parques está la Isla Margarita donde puedes caminar, disfrutar del show de luces y música en la fuente de agua, si quieres hacer ejercicio puedes darle la vuelta y correr 5 kilómetros, o simplemente llevarte un libro y sentarte en las sillas de la entrada o con una manta bajo un árbol; Varosliget, conocido como el parque de la ciudad, se encuentra atrás de la plaza de los héroes y con la hermosa vista del castillo, el lago artificial y los baños termales Széchenyi, es un lugar perfecto para una tarde otoñal; por último está el parque Kopaszi-gát, al sur de la ciduad en el lado de Buda, es una parque pequeño pero muy bonito con una playa artificial donde puedes acostarte a disfrutar del día y relajarte mientras oyes la naturaleza o lees un libro.

Ir a una dulcería a comer tortas y chocolate caliente

Esta es una de mis actividades favoritas durante el otoño, reunirme con amigos en una dulcería o pastelería a comer postres y tomar chocolate caliente o cualquier otra bebida caliente que te quite el frío. De mis postres favoritos está el strudel de manzana, la torta de maracuyá, los macaroons, o cualquier tipo de torta realmente jaja. Y el chocolate caliente de chocolate blanco es otro de mis puntos débiles y si aún no lo has probado y te gusta el chocolate blanco, no sé qué estás esperando para hacerlo durante este otoño. Dos de las dulcerías que más me gustan son Ruszwurm en Buda y Sugar! En Pest.

Visitar el zoológico

Por primera vez en mis tres años en Budapest fui al zoológico y les digo: FUE GENIAL. Me encantó realmente la experiencia. Siempre he tenido sentimientos encontrados con los zoológicos porque aunque me encanta ver a todos los animales que comúnmente no ves en las calles, me pone un poco triste verlos encerrados en sitios que no son sus hábitats naturales. Sin embargo, debo decir que este zoológico está muy bien cuidado, los animales se ven contentos y bien alimentados, no están hacinados 10 en un espacio mínimo, y aunque pudiera tener un poco más de mantenimiento, de verdad que es una gran experiencia y creo que haber ido en otoño fue la mejor decisión posible porque cuando entras a los invernaderos, tienen una temperatura muy alta, cosa que con el sol y calor de verano me imagino debe ser un poco insoportable.

La entrada es realmente económica, cuenta 3.000 florines (unos 10 euros) para adultos y 2.500 para estudiantes (unos 8 euros). Abren de lunes a viernes de 9 de la mañana a las 5 de la tarde y los fines de semana desde las 9 de la mañana hasta las 5 y media de la tarde. Adentro puedes comprar comida y bebidas, pero si lo deseas, puedes llevar contigo también tu agua y meriendas si vas a pasar todo el día ahí. Otra cosa que me gustó mucho es que se ve que buscan crear conciencia en la gente sobre la vida y el cuidado de los animales y las distintas especies que tienen ahí.

Otoño en Budapest

Otoño definitivamente es una temporada con mucho potencial y mil y un cosas por hacer. No dejes que el inicio del frío y los días más cortos con atardeceres tempranos te quiten las ganas y la emoción de siempre buscar conocer algo nuevo en la ciudad o simplemente salir de tu casa a pasear y caminar y respirar un aire distinto. Lo bello de esta temporada es que a veces nos puede sorprender con días muy soleados o días más friitos, pero nunca sabes exactamente qué tendrás. Como todos sabemos, después del otoño viene el invierno y los días más fríos y más oscuros, pues tenemos que aprovechar de estos soleados que tengamos al máximos y disfrutarlos como sea.