¿Sabías que Beamish es el único museo viviente en todo en Reino Unido?
No te pierdas en esta guía la mejor ruta para conocer el único museo en donde verás el pasado como lo hicieron sus verdaderos protagonistas ¡Bienvenidos/as!
Muchos museos son verdaderos ‘almacenes del pasado’. Toda una oportunidad para saber cómo vivían nuestros, pero seamos sinceros, también muy aburridos. ¿Qué mejor forma de saber sobre nuestra pasado que vivirlo en primera persona?
¿Te imaginas un museo donde vivir el pasado en primera persona?
Índice
Museo de Beamish
En Beamish podrás montar en coches de más de dos siglos (Dave Cleghorn)
‘Doc, has creado una máquina del tiempo? ¿En un delorean?’ ¡Así es! En Beamish sentirás que viajas al pasado como la película regreso al futuro. Eso sí, mi delorean se llamaba seat Ibiza y lo único en común con el pasado eran los años de antigüedad…
Cerca Durham se encuentra el museo viviente de Beamish. Puedes viajar desde Newcastle con la línea de bus ‘Waggonway’ número 28. Aunque te aconsejo echar un vistazo y planificar el viaje con tiempo. La mayoría de los autobuses son cada hora. No obstante, la mejor forma de llegar a Beamish es en coche. Tardarás unos 25 minutos y es muy fácil de llegar.
La entrada en Beamish te costará unas 19£. Un poco caro, sí, pero guárdala bien !Podrás usarla durante todo el año! No está nada mal, ¿verdad?
Beamish tiene una extensión de más de 300 hectáreas. La temática está orientada a finales del siglo XIX y principios del XX. Aquí te presento los principales lugares para ver en Beamish:
Minerías de Beamish
Parte de la fábrica de carbòn de Beamish (picfair.com)
Newcastle y esta pequeña región de Durham fueron también fuentes de carbón durante siglos para toda Inglaterra. De hecho, la primera mina en Beamish data del 1763.
En tu recorrido podrás ver cómo eran las fábricas y el transporte del carbón durante la etapa industrial en Inglaterra. Te aconsejo entrar en la fábrica y recorrer todas y cada una de sus salas.
Sin embargo, la joya de la corona la encontrarás en la máquina de vapor. Con una altura de casi dos pisos, esta máquina funcionaba para mover y transportar el carbón desde la minas a trenes. El minero hará las delicias del lugar poniéndola en marcha al mismo tiempo que te explican su historia y funcionamiento.
¿Sabes cuál fue el primer sitio en el mundo en crear una línea de tren de transporte? ¡Así es! Beamish fue el primer rincón en todo el planeta en crear en 1727 el «Cause Arch railway», la línea de transporte de mercancías más longeva del mundo.
Interiores de las minas (Beamish Museum)
¡No te vayas todavía! A la salida de la fábrica encontrarás la entrada a las minerías de principios del siglo XIX. Aquí puedes vivir en primera persona un simple día de trabajo para los mineros ingleses en 1820. ¡Mucho cuidado! Los túneles son realmente estrechos y el camino se vuelve más duro conforme nos adentramos en la mina.
Casa de los mineros y escuela
Interiores de la escuela de Beamish (Glyn)
A las afueras de la fábrica se encuentran los barracones y la escuela de las familias de los mineros. Muchas familias en Inglaterra dependían de la mina. Por ello, decidían mudarse a estos pequeños barracones y hacer vida con el resto.
En las salas podrás ver la lavandería, cocinas, y las habitaciones de los niños y las mujeres. Por cierto, no te pierdas la escuela. Aquí encontrarás una auténtica clase de principios del siglo XIX.
¡No te despistes! A menos que quieras ser el próximo alumno de ‘el maestro’.
Como anécdota descubrirás cementarios alrededor de los barracones. Muchos jóvenes y adultos perecían en las minas. Por lo que la mayor parte de ellos eran enterrados aquí junto con sus familias.
Moverse por Beamish
Trenes en Beamish (Rory Lushman)
Verás que en Beamish hay múltiples entradas. Como siempre he dicho, caminar es muy sano.
Te aconsejo también moverte y disfrutar de las impresionantes vistas del museo en trenes y autobuses con más de 150 años de historia. Aquí los mejores destinos que no te puedes perder:
Granjas y la cabaña de Joe
Granjeros en Beamish (snookypoops)
De forma similar a muchos pueblos ingleses en la época industrial, Beamish está lleno de animales. Verás caballos, ovejas, vacas, y todo tipo de animales silvestres de aquella época.
Visita la granja para ver en primera persona como los granjeros cosechaban y preparaban la comida. Tendrás la oportunidad de poder degustar leche y queso fresco del día ¡Una auténtica delicia!
Como nueva atracción, Beamish ha abierto la cabaña de Joe. Esta cabaña es una réplica exacta de los caseríos de pequeños empresarios del siglo XIX. Aquí veras periódicos, ropas, y objetos originales pertenecientes a Joe. Perfecto, pero… ¿quién es el famoso Joe?
Cabaña de Joe (Andrew Nelson)
Joe fue un pequeño comerciante de Beamish asesinado en 1826. Su asesinato conmovió a la región y al país de ahí su popularidad. A pesar de los esfuerzos, dos siglos después no ha sido posible encontrar el cadáver del famoso Joe.
Pueblo de Beamish
El pueblo de Beamish es la parada más importante del museo. Conforme vayas caminando encontrarás comercios y edificios con historias únicas y espectaculares. Aquí te presento las paradas que no debes perderte en el pueblo de Beamish:
Consulta del dentista
El dentista (Brian Stoddart)
Solo con pensarlo me chirrían los dientes. Aunque no soy muy fan del dentista, ésta fue sin duda una de mis paradas favoritas.
En la consulta del dentista encontrarás auténticos utensilios y una consulta original de principios del siglo XIX. Te aconsejo hablar con ‘el dentista’. Es todo un personaje singular con maravillosas historias que contarte. Eso sí, no te dejes convencer tan fácilmente. Es especialista en la extracción ‘rápida de dientes».
El Banco
Entrada del al banco de Beamish (Gordon Hawks)
La magia de Beamish te irá trasladando poco a poco al pasado sin que te des cuenta. Mezquino y astuto encontrarás al banquero y su asistente en el banco de Beamish. Aquí podrás ver inventarios y libras auténticas de hace más de dos siglos.
Si juegas bien tus cartas conseguirás que el banquero te enseñe la caja fuerte que se encuentra en los pisos inferiores del banco, ¿serás capaz de conseguir su ansiada contraseña?
Caballerizas
Carruajes de Beamish (Nigel)
Aunque los trenes y coches a vapor existían en el siglo XIX y principios del XX, los carruajes seguían siendo un símbolo de distinción y glamur.
En la caballerizas podrás disfrutar de cómo los artesanos preparaban a los caballos a la antigua usanza. Te aconsejo dar una vuelta alrededor para disfrutar de estos animales y los maravillosos carruajes. Aviso a navegantes. El alquiler de los carros es un poco caro.
No obstante, si de verdad quieres sentirte como un lord/doncella de la Inglaterra victoriana el paseo merece la pena. Disfruta a lomos de un caballo las espectaculares y únicas vistas de Beamish y su museo.
Tienda de dulces y farmacia
Tienda de dulces
Interiores de la tienda de dulces (Peter)
Como en todo pueblo inglés no podrían faltar la tradicional tienda de dulces.
Para los más golosos y golosas la tienda de dulces es de visita obligatoria. En esta tienda encontrarás todo tipo de delicias tradicionales, chocolate, y cremas que nunca llegaste a imaginar. Es el perfecto lugar si quieres darte un buen descanso después de tanto paseo y apreciar la gastronomía del lugar.
Te aconsejo ver la tienda un poco alrededor y preguntar a las tenderas que se encuentran en el mostrador. Podrás ver tarros, botes, y utensilios antiguos en donde se almacenaban estos dulces pecados. La decoración e historia de este lugar son simplemente magníficas. Prepara tu cámara e inmortaliza este momento.
Farmacia
Interiores de la farmacia de Beamish (Fiveprime)
No lejos de la tienda de dulces se encuentra la farmacia. Te aconsejo echarle un vistazo y apreciar todo los artilugios y rarezas medicinales de más de dos siglos.
Como anécdota sabrás que la mayoría de las medicinas son de origen alemán. Verás que la farmacéutica “Bayern” patrocina casi todos los productos en este lugar. El farmacéutico me contó que antes de las guerras Alemania eran el principal exportador de medicinas en Reino Unido. Tras los conflictos, ya no hay casi vestigios de productos, restaurantes, o cultura alemana en Reino Unido.
Museo masónico
Vidrieras del museo masónico (Matt Moonlight)
Como siempre he dicho, las mejores partes se dejan para el final. Si eres amante del misterio o te gustó el código Da Vinci, el museo es el lugar que no te puedes perder.
Los masones son una organización secreta inspirada en tres pilares fundamentales: amor por los otros hermanos, verdad, y compasión por el prójimo. Todos estos conocimientos han sido plasmados en sus libros, museos, y cuadros.
Cuando entres al museo mirar con sumo cuidado alrededor para apreciar todos y cada uno de estos símbolos. Aunque no se sabe con exactitud cuándo surgieron los masones, los primeros escritos se refieren a ellos sobre el año 1600.
Símbolos masónicos en Beamish (Marc Hagen)
Las diferentes leyendas afirman que los masones siempre han estado presentes en nuestra sociedad. Desde los templarios, pasando por los padres fundadores de Estados Unidos, hasta las grandes figuras políticas internacionales. El enorme aprecio por la cultura y descubrir la verdad hizo que fueran perseguidos durante siglos por la iglesia.
¿Qué encontrarás en el museo?
Gran comedor masónico (redbubble)
En 1600 los masones se instaron por primera vez en Inglaterra y Durham fue su punto de partida. El museo que visitarás es del año 1800 y durante décadas fue el lugar de encuentro principal para muchos masones en la región.
El museo en sí mismo es una auténtica maravilla con muchas curiosidades que te sorprenderán. Sin duda, mi parada favorita fue el salón principal. Aquí podrás ver el ‘gran salón’ y también el sillón del «gran maestre masón». Echa un vistazo a los cuadros alrededor y su simbología. Por ejemplo, verás el famoso ojo que aparece en los dólares americanos de los illuminatis, además de una pintura del cielo y un gran esqueleto.
Silla del gran maestre (Biggestwoo)
Si te manejas bien con el inglés debes preguntarle a la guía que hay en su interior. Esta señora fue hija de masones y te explicará de forma apasionante toda la simbología e historias de este lugar !Estuve más de dos horas hablando con ella!
¿Sabías qué?
En el pueblo de Beamish se encuentran dos figuras conocidas como el pastor y la pastora. Según cuentan los locales, estas dos figuras fueron introducidas en Beamish por asesinos en el mercado negro. Fue la única figura de plomo que sobrevivió en Durham cuando la mayor parte de este material fue usado para las guerras napoleónicas.
¿Ganas de más? No te pierdas mis últimas entradas sobre Newcastle y qué visitar en este fantástico lugar. Si te gustó la entrada dame un like y comparte. Sígueme para seguir descubriendo más secretos de ‘la capital del norte’ ¡Hasta la próxima!
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