La semana pasada os dejé a medias, os dejé con las ganas de saber qué puede ofrecer Vigevano. Aquí vamos con Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2). Ante todo vuelvo a recordaros cómo se puede alcanzar este precioso pueblo. En coche, saliendo de Milán y cogiendo la carretera Statale Vigevanese, se llega en 30 minutos. En tren, desde la estación de San Cristoforo, o la de Porta Genova, lleva el mismo tiempo. Después de haber visitado Abbiategrasso, os aconsejaría volver a coger vuestro coche o el tren para alcanzar Vigevano. Lo mejor, sería ir en coche porque entre los campos que rodean la carretera, el río Ticino y el Naviglio, los panoramas son muy bonitos.
Índice
Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2) Vigevano, una pequeña Milán.
Vigevano es un pueblo situado en la provincia de Pavía, en pleno Parque del Ticino. Desde el punto de vista económico, está incluido en una zona agrícola e industrial muy desarrollada llamada Lomellina. En particular, es muy conocido por la producción de zapatos de gran calidad, exportados en todo el mundo. A este respecto, me gustaría subrayar que, en 1866, surgió aquí la primera fábrica de zapatos a nivel nacional y que las pruebas de estas célebres producciones están conservadas en el Museo del Zapato de la ciudad.
Por lo que se refiere al patrimonio cultural y artístico es, sin lugar a duda, uno de los lugares más bonitos del norte de Italia y encierra un gran número de monumentos.
Aquí os dejo el link oficial del ayuntamiento de Vigevano: https://www.comune.vigevano.pv.it/
Un poco de historia. Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2)
El pueblo de Vigevano nació como insediamento romano. Esto lo demuestra el descubrimiento de una antigüa carretera que cruza el centro de la ciudad. A lo largo del siglo XII, fue razón de conflicto entre Milán y Pavia que intentaban ganarse el control de la zona comercial de la Lomellina. Padeció, durante 150 años, destrucción y habmbre. Por esta razón, a partir de la primera mitad de 1200, decidió adherir a la Segunda Liga Lombarda.
Entre los siglos XIV, XV y XVI, con la llegada de las familia señoriales, Vigevano fue ganando cada vez más importancia. Pronto se convirtió en punto clave del juego económico y político del norte de Italia. Fueron los Visconti y los Sforza los que hicieron del pueblo una verdadera capital. Con los Visconti mejoraron las condiciones logísticas de la ciudad puesto que gastaron mucho dinero en la construcción de carreteras comerciales y del castillo. Cuando los Sforza se hicieron con el poder, trasladaron aquí su residencia de verano y la convirtieron en segunda capital del Ducado de Milán.
Con la desaparición de los Sforza, Vigevano fue sometida a varios dominios extranjeros. Estos se sucedieron entre los siglos XVI y XIX, entre los cuales destacaron el español, el francés y el austríaco. Fueron años muy duros para la ciudad, que empezó a recuperarse solo a partir de la segunda mitad de 1800. Esto fue posible tras el nacimiento de la fábrica de cerveza Peroni y de numerosas otras, relacionadas con el sector téxtil y la moda.
Lo que no os podéis perder.
Como decía líneas arriba, Vigevano encierra una gran cantidad de monumentos, símbolos de las épocas históricas que configuraron la ciudad.
Piazza Ducale, el Salón de Italia. Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2)
La Piazza Ducale constituye el centro de la ciudad de Vigevano y es considerada la plaza más bonita de Italia. Está construida en estilo renacentista. Su construcción empezó en 1492 por voluntad de Ludovico Il Moro, y terminó en 1494. El dibujo original era de Leonardo da Vinci y fue realizada por Donato Bramante.
La plaza mide 134 metros de largo y 48 de ancho y se desarrolla alrededor de una plaza rectangular con edificios porticados en tres de los cuatro lados. Uno de ellos está ocupado por la Catedral de Sant’ Ambrogio. Al lado opuesto, se puede admirar la estatua de San Juan Nepunoceno, un santo del norte de Europa, símbolo de la supremacia austríaca. En lo que se refiere a las otras construcciones, recomiendo que os fijéis en los preciosos detalles que ofrecen. Los hermosos frescos y las falsas columnas constituyen elementos imprescindibles de esta maravilla arquitectónica.
La plaza constituye un lugar de encuentro al que ir a pasar una tarde disfrutando de un buen paseo en compañía de familiares y amigos. Es por esta razón que en ella encontramos un gran número de bares. Entre ellos, muy importante es la histórica pastelería Colombo, inaugurada en 1997. Aquí el link: https://pasticceriacolombo.it/. En este lugar se puede disfrutar de un café, un chocolate caliente, un té o un aperitivo. Se pueden saborear los riquísimos productos que ofrece. Un consejo: provad la célebre Mugnaga. Es un postre típico de esta zona, un panettone rellenado con trozos de mugnaga, es decir, albaricoque.
El Castello Sforzesco, hermano del milanés. Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2)
Desde uno de los lados de la plaza, se accede al Palazzo Ducale, que debe su existencia a los Visconti y los Sforza. Está construido en la parte más alta de la ciudad y ocupa dos ectáreas.
Hay tres elementos constitutivos del castillo que no podéis perderos. Ante todo, el hermoso parque encerrado dentro de la fortaleza. Es un lugar único situado cerca del centro de la ciudad, al mismo tiempo alejado del ruido de la época moderna.
En segundo lugar las caballerizas realizadas por Bramante, son otro asombroso elemento de esta construcción fortificada. En ella se podían guardar más de mil caballos. También tiene cierta importancia la llamada calle cubierta, una vía de escape realizada bajo petición de los Sforza. Esta vía conecta el interior del castillo a una de las calles exteriores de Vigevano.
Finalmente la Torre de Bramante, cuya construcción empezó en 1198 y terminó hacia finales del siglo XV. Para completarla, el artista se basó en su hermana milanesa. Desde ella, se pueden apreciar unas fantásticas vistas de la ciudad.
La Cattedrale di Sant’Ambrogio, el Duomo de Vigevano. Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2)
La construcción de la catedral empezó en 1532 bajo petición de Francesco II Sforza, y acabó en 1612. Lo que más llama la atención es su forma concava. Esto es gracias a una cuestión de asimetría entre la plaza y la fachada de la misma. Ésta última, fue realizada siguiendo el estilo barroco y es una verdadera joya artística en el complejo de la plaza.
De gran importancia es el tesoro de la catedral, que incluye la túnica utilizada por el papa durante la coronación de Napoleón a rey de Milán.
La hora de la despedida.
Como siempre espero que Un día de excursión: Abbiategrasso y Vigevano (parte 2) también os haya animado a visitar Milán y sus alrededores.
Habrá más, no lo dudéis.
¡Hasta la próxima!
Y, como siempre, aquí os dejo mi enlace de Facebook.
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